lunes, 15 de julio de 2013

Mayoría Absoluta, inhabilitación a la vista.


En los pasados plenos del ayuntamiento se ha utilizado uno de los argumentos de manual que utiliza el PP cada vez que se piden explicaciones sobre actuaciones poco claras, cuando un político de esa formación está salpicado por cualquier acto de dudosa legalidad ponen por delante de cualquier otra consideración o referencia el haber obtenido mayorías absolutas. Siempre que se sienten acorralados utilizan como argumento de defensa una supuesta legitimidad universal que adquieren por ser el partido más votado.

No seremos nosotros quienes cuestionemos la validez de las mayorías absolutas que el PP ha obtenido en dos ocasiones en el ayuntamiento de Chiva, es una realidad que no admite discusión, ni puede ni debe obviarse –sobretodo no se debe, si se quieren tener referentes políticos de lo que no hay que hacer– pero esa mayoría, pese a quien pese, no legitima actos de dudosa legalidad o manifiestamente ilegitimos, esa mayoría no es un cheque en blanco que permite hacer lo que les venga en gana, el poder legal que otorgan los votos no legitima el incumplimiento del ordenamiento jurídico, precisamente de lo que se trata es de todo lo contrario –de la obligación que impone el refrendo popular de los votos– imposición de mayor fuerza a la de cualquier ciudadano en el cumplimiento de la legalidad ya que los cargos electos son o deben ser un referente ético y social para sus electores.

Los representantes políticos deben ser un referente ético con en el que se sienta identificada el resto de la sociedad, las triquiñuelas utilizadas para bordear –cuando no saltar– la legalidad solo puede ser justificado por el cientelismo y el hooliganismo de los militantes del mismo partido, los primeros porque han escogido a cambio de prebendas ese tipo de referente,  los segundos porque son incapaces del más mínimo análisis critico.

De esa realidad hay que extraer conclusiones que nos hagan no repitamos los errores que faciliten cualquier otra clase de mayoría al PP, mayoría que no ha sido fruto de la casualidad sino de una tela de araña tejida en torno a un objetivo concreto, el de tener esa mayoría que en la actualidad posee con el fin de hacer lo que le viniera en gana con formas mas propias de un despotismo absolutista que de un sistema democrático. Por ello, a grandes rasgos, queremos hacer una enumeración de algunos de los aspectos que han tenido importancia o trascendencia para llegar a la situación en que nos encontramos.

Lo primero que el PP trata de hacer olvidar –pero que hay tener muy presente– es que la alcaldía la obtuvo mediante una moción de censura, con el apoyo de la Plataforma, el 22 de marzo de 2005.

Es muy propio de ese partido criticar, censurar e incluso ilegitimar a quienes han obtenido las alcaldías mediante ese procedimiento, normalmente contra el PP –incapaz de llegar a acuerdos con ninguna formación– para ello utilizan la prensa y todos los medios publicitarios –la gran mayoría lamentablemente– a su alcance con ese objetivo, y al contrario cuando detrás de la moción se encuentra el PP, por aquello del sentido de posesión del poder político que poseen; la legitimación e ilegitimación que siente el PP respecto del poder, legitimo cuando son ellos quienes lo poseen e ilegitimo cuando lo poseen los demás.

En el acuerdo firmado con la Plataforma contra el plan general para obtener la alcaldía, se puede leer:

-Reactivación del P.G.O.U., que desarrolle el modelo de territorio que es común en ambas formaciones políticas y que establece como principales directrices el crecimiento del suelo residencial entorno al casco urbano, ampliación de asentamientos industriales en función de las necesidades del propio municipio y la potenciación de nuevos asentamientos residenciales (Urbanizaciones), estas directrices se someterán a la disciplina de un modelo de crecimiento sostenible del municipio.

El urbanismo... ¡siempre el urbanismo!, una vez obtenida la alcaldía se desplazó a quien en este caso resultó el tonto útil ¡la Plataforma!, que aparte de dar la alcaldía a quienes prometieron y no cumplieron, apoyaron loa comienzos de lo que sería la política de “pan, circo y propaganda” –en aquellos momentos todavía salían en la foto– así no puede extrañarnos que donde no se podía ni debía construir (según el modelo común a ambas formaciones, terrenos de Cotino) ¡ahora se puede!, del proyecto económico común para este pueblo (según el PP y la Plataforma) basado en la construcción y la jardinería, ahora según Haro y el PP hay que fomentar la industria, mientras tanto se ha dejado pasar el tren de las oportunidades siendo incapaces de ampliar el polígono industrial la Pahilla (cuando había demanda de suelo industrial), eso sí para algunos no es problema la declaración urgente de interés comunitario y montar industrias en terrenos sin calificación industrial, por eso y para eso se tiraron a la basura 150 millones de pesetas invertidos en el PGOU, lo que fue un intento de regular el pasado, presente y futuro de Chiva en el terreno urbanístico, no interesaba , al parecer lo que interesaba no era la regulación sino la desregulación.
Desregulación que ha llevado a un caos urbanístico donde se imponen los intereses económicos de algunas empresas sobre los de todos los ciudadanos, para que a falta de Plan General se autoricen –a según quien– las actuaciones que pida, la falta absoluta de suelo edificable en torno al casco urbano –que ha quedado desplazado frente a otras opciones– y donde se han permitido construcciones de hasta tres alturas por encima de lo que sería recomendable y lógico, de otra forma al estar regularizado no podría hacerse, habría suelo industrial, urbano y de servicios, regularizado y a un precio mejor para la ciudadanía, claro está esto no fomenta el clientelismo ni las posibles prebendas o deudas desde los promotores/constructores hacia quienes aprueban y consienten.

Tras apartar del equipo de gobierno a quienes le dieron la vara de mando –la Plataforma– había que hacer lo imposible para que no pudieran volver a ser el fiel de la balanza y devolver el mismo pago recibido,  en política hay quienes aplican la máxima de que al enemigo no hay que derribarlo no ¡hay que rematarlo!, resultó cuanto menos chocante que a quienes les habían entregado la alcaldía se les acusase de traidores, en agosto de 2006 la Plataforma hacía público un comunicado al respecto de la ruptura en el que, entre otras cosas decían:

 Se nos acusa de chantaje y traición, parece una fotonovela. La realidad es que aquí no hay más desleal, traidor y chantajista que el propio Haro y su cuadrilla de acólitos sin opinión ni voz propia, marionetas que bailan al son de Haro, aunque no compartan muchas de sus decisiones. 

El PP se comprometió a impulsar el PGOU para acceder a la alcaldía, nada de nada, el PP se comprometió a la aceptación de Urbanizaciones, nada de nada, el PP se comprometió a la municipalización del suministro de agua en Urbanizaciones, nada de nada. Eso es lo que consideramos por nuestra parte traición, deslealtad y chantaje – sí chantaje puesto que una vez instalado en el sillón – demuestra claramente no sólo a la PCU sino a todo el pueblo que lo único que le interesa es la permanencia en el mismo, y para ello no repara en utilizar fondos públicos para hacer campaña electoral. 

Resulta divertido que un PP que dice en sus panfletos, lo del chantaje y su compromiso de no pactar con la PCU haya ofrecido ya, el impresentable de Haro, la posibilidad de realizar listas conjuntas para las próximas elecciones: NUESTRA RESPUESTA HA SIDO ROTUNDA, NO. 

En las siguientes elecciones municipales conocimos el Partido para la Defensa de las Urbanizaciones y Diseminados (P.D.U.), una nueva opción para quienes defienden los intereses de las personas que residen fuera del casco urbano como enfrentados y distintos de quienes residen en este; que casualmente encabeza una persona que meses  después aprobará plaza de funcionario en el ayuntamiento, acompañado en la lista de otras personas con diversas responsabilidades en empresas constructoras y otras con intereses urbanísticos variados.

En la candidatura del PP, aparecen Presidentes de asociaciones candidatos a concejales (colombicultura y en el 2011 el de la peña taurina), haciendo una descarada utilización de las mismas, se conceden subvenciones a estas en base a los votos que se pudieran obtener y la maniobrabilidad y simpatía hacia la causa de las juntas directivas. 

Personas con trayectorias de vinculación con la izquierda –en palabras de militantes del PP- aparecen en sus listas, tratando de emular el esquema de partido único de infausto recuerdo, lamentablemente este tipo de maniobras ha contado con el apoyo de la mayoría de militantes del PP en Chiva incapaces de discernir sobre la utilización de los unos de los otros y viceversa, esto les ha llevado a la conclusión de que la política es todo este arte de marrullerías y triquiñuelas, no el potenciar y trabajar por el bien común.
Nunca puede dar lo mismo el medio que se utiliza en política para llegar a cualquier fin. Lo demás es tener la misma concepción de la política que Maquiavelo; en otras palabras “el fin justifica los medios”, no es de extrañar con esa concepción la situación por la que atraviesa el PP a todos los niveles, de mentiras, corrupción y falsedades. 
Ingentes gastos de publicidad en campañas electorales, diseñadas y dirigidas por profesionales de la publicidad, gastos imposibles de mantener por la militancia del PP de Chiva y de los que jamás se sabrá el importe ni la procedencia del dinero, mucho menos habrá quien levante la voz y exija cuentas claras en ese partido. 
Propaganda permanente a través del panfleto llamado Noticias de Chiva, un panfleto donde la empresa editora siempre ha cobrado pese a que no existía contrato en el que en principio y cuando las relaciones eran buenas, jamás exigió la Plataforma la participación democrática del resto de partidos y/o concejales en la redacción del mismo. 
Para los actos y comidas organizados por el PP, se efectúan llamadas telefónicas a militantes y posibles simpatizantes recordando la celebración del acto a través de números de teléfono propiedad del ayuntamiento, una nueva forma de llamar a maitines. 
Asistimos a la época de la fiesta como mérito de gestión política ante la incapacidad manifiesta de gestionar servicios, las Clavarías –en proceso de desaparición renacen cual ave fénix– forzadas en torno a militantes y  simpatizantes del PP, opositores a empleo público municipal, etc. La utilización de las fiestas populares en la promoción de valores del siglo XIX con una clara y manifiesta influencia de la iglesia católica, tan rancios como obsoletos, continuación del tardofranquismo moral, por ello no puede resultar extraña la participación obligatoria de los concejales del PP en toda clase de actos, litúrgicos y de carácter laico, arropados en ellos por otros correligionarios y/o funcionarios públicos, a los que se convoca a asistir de forma obligatoria, otra manera de manifestar la moralina que tratan de imponer a la sociedad. Lo que nunca ha aparecido en “sus” Noticias de Chiva ha sido información sobre los catering, refrigerios y coste de los mismos, con los que se agasaja a los participantes en procesiones y actos similares, naturalmente pagados por el pueblo de Chiva.
Apadrinamiento de Abel Antón desde 2006 de carreras populares, el éxito y carisma de Haro era tan grande que traspasaba fronteras regionales, los campeones del mundo se daban de tortas por compartir una foto con él, era tanto el cariño que resultaba empalagoso, no era normal, había algo que no encajaba en el puzzle, así que juntando las partes nos enteramos que el maratonista campeón era militante del PP –por ahí podía venir la pasión– pero no, no era una cuestión ideológica,  era porque participaba con todos los gastos pagados y asignación económica por participar. La pasión y el amor fingido estaban pagados, así que cuando dejó de haber dinero para estos gastos se acabó de inmediato. 

Es la época de la supuesta “gratuidad de los libros”  que consiste en entrega de dinero a todos los vecinos que tengan hijos en colegios, ayudas carentes de sentido social y llenas de función clientelar, las rentas de los demandantes son obviadas, así como los tipos de colegios y la situación socioeconómica, lo importante es llegar al mayor número de padres como “ayudador” y que se recuerde quién es el que ayuda, por eso los cheques son entregados personalmente por Haro o por alguno/a de sus concejales/as. 

En el ayuntamiento, como órgano de gestión, se produce una multiplicación de la plantilla de personal –salvo en los trabajadores de la brigada de mantenimiento y limpieza– se multiplican el número de funcionarios en la administración y en la policía, sobre todo se produce un aumento imposible de mantener –por los elevados costes económicos– del número de técnicos, formando una plantilla de técnicos más propia de una población de 50.000 habitantes que de una de 15.000; estos puestos tienen como finalidad tejer una especie de tela de araña para someter a un control total todos y cada uno de los departamentos del ayuntamiento, para ello se nombran técnicos de nivel superior a los existentes con anterioridad a Haro, de este modo el mando y control corresponde a estos nuevos que han aprobado su plaza con Haro. De las oposiciones, parentescos con concejales, miembros del PP, etc. circularon infinidad de panfletos por la población que aclararon quien es cada cual de los/as nuevos/as funcionarios, funcionarios que además son fáciles de identificar para gobiernos posteriores de signo contrario al PP, solamente hay que mirar quienes son los que cobran el plus llamado productividad, un plus que debería retribuir ese concepto y que en realidad está pagando fidelidades, clientelismo y otras lindezas de ese estilo.

Todo eso nos ha llevado a una situación de bancarrota en el terreno económico, a una inflación de personal imposible de digerir, y a una situación política de clientelismo y de falta de valores éticos que ha acabado en la situación actual cuyo ejemplo más palpable lo tenemos hoy, día en que Haro se sienta en el banquillo de lo acusados pudiendo salir inhabilitado como alcalde, pese a los recursos que presentará en el Tribunal Supremo, en el de Estrasburgo, en el de la Haya o en el de Pernambuco, mientras pueda hacer uso del dinero público seguirá recurriendo.

Sobre la obra y milagros de Haro podíamos haber escrito un libro de mayor tamaño al del Quijote, solamente queríamos dar unas pinceladas sobre lo que ha supuesto Haro y su gestión para Chiva a modo de recordatorio el día de su juicio por falsedad en documento público y prevaricación.

Cuantas más personas dependan directamente para su subsistencia del favor político con más votos seguros se podrá contar. La adhesión primitiva a un caudillo cercano al que se conoce y se entiende porque habla como nosotros se fortalece cuando por culpa de leyes forasteras y de un sistema judicial impersonal y por lo tanto sospechoso ese mismo caudillo que daba tanto trabajo y se preocupaba tanto por el pueblo se ve acusado en los tribunales.  (Todo lo que era sólido - Antonio Muñoz Molina)